Hoy debería haber continuado el manual escribiendo el capítulo correspondiente a mis ‘desgracias’, como me gusta llamar a los percances y ‘obstáculos’ que tuve en la vida.
Hoy me di cuenta cuán bajo he caído... soy tan patética! Nada más patético que encontrar regocijo en las desaveniencias; me di cuenta de que transmito una sensación de dejo y lástima en mis amigos .. ¡Qué bajo caí realmente! (2)
Lo peor de todo es que estoy mejor sintiéndome mal, sintiendo pena por mí misma Una prueba de ello es que los días que dejé de escribir fueron porque estaba con buenos ánimos. ¿Acaso sólo me inspira la tristeza? ...No es una buena fuente de inspiración, a mi parecer.
Hace tiempo atrás (años) me atrajo la idea de ser lúgubre y misteriosa, pero tan mala como soy en todo, mi empresa fracasó, resultando en un cambio de imagen a adolescente inmadura, patética... Mi yo anterior no hubiera soportado a la actual Lorena. La vieja tenía sus defectos, pero era más feliz.
Ahora me pregunto: “¿Cómo mejorar, cómo cambiar?” Para cambiar, creo sinceramente que el cambio debería nacer desde mi interior y aunque lo intente, no puedo forzarme a hacer algo no-natural, no-espontáneo.
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